Y así, como quien no quiere la cosa, llegamos a fin de año… De repente, abrí los ojos, miré el reloj del celular y, además de marcarme la hora, decía “Viernes 31 de Diciembre”… Y me lo dijo así, de golpe, y no lo podía creer. Se venía acercando, ya todos pensábamos “que termine el año por Dios”, pero llegó y todavía me cuesta creerlo… Miro atrás y veo cosas que quisiera olvidar, cosas que no quiero borrar jamás de mi memoria y cosas que no sé cómo quiero que queden, si en el olvido o no…
Sí tengo la certeza de que siento que el año, a mí personalmente, me pasó sin penas ni glorias, sin nada eternamente recordable…. Pero por lo menos empiezo el 2011 sabiendo cómo no quiero que termine =P
Buscando por la PC alguna foto para este post, me encontré con esta (de una búsqueda laboral del Unilever) y me empecé a preguntar ¿qué quiero de mi 2011? ¿qué de lo que quería para 2010 sigo queriendo porque no se dio, o porque quiero que se repita?
Así que en el fondo escribir esto me deja reflexionando, pero eso lo compartimos en otro momento….
Por ahora, sólo pido y deseo que este 2011 que empieza llegue lleno de pilas, fuerza, ganas, risas, alguna lágrima también (para valorar más las risas), amigos (los de siempre, alguno nuevo, y alguno olvidado que vuelva), logros, caídas (para después celebrar que nos levantamos), amor, reflexión, paz, salud… ¿Será mucho pedir? Claro que no digo que venga todo junto, pero sí racionadito, en su justa medida y en el momento apropiado… para todos, y para mí también, ese es mi deseo de fin de año…
Y comparto unas palabras que me enviaron, espero les gusten, como a mí…
FELIZ 2011!!!!
Deseos para el año nuevo
Te deseo primero que ames y que amando, también seas amado. Y que, de no ser así, seas breve en olvidar y que después de olvidar, no guardes rencores. Deseo, pues, que no sea así, pero que si es, sepas ser sin desesperar.
Te deseo también que tengas amigos, y que, incluso malos e inconsecuentes, sean valientes y fieles, y que por lo menos haya uno en quien puedas confiar sin dudar.
Y porque la vida es así, te deseo también que tengas enemigos. Ni muchos ni pocos, en la medida exacta, para que, algunas veces, te cuestiones tus propias certezas. Y que entre ellos, haya por lo menos uno que sea justo, para que no te sientas demasiado seguro.
Te deseo además que seas útil, más no insustituible. Y que en los momentos malos, cuando no quede más nada, esa utilidad sea suficiente para mantenerte en pie.
Igualmente, te deseo que seas tolerante; no con los que se equivocan poco, porque eso es fácil, sino con los que se equivocan mucho e irremediablemente, y que haciendo buen uso de esa tolerancia, sirvas de ejemplo a otros.
...Te deseo por fin que, siendo hombre, tengas una buena mujer, y que siendo mujer, tengas un buen hombre
Te deseo que siendo joven no madures demasiado de prisa, y que ya maduro, no insistas en rejuvenecer, y que siendo viejo no te dediques al desespero. Porque cada edad tiene su placer y su dolor y es necesario dejar que fluyan entre nosotros.
Te deseo de paso que seas triste. No todo el año, sino apenas un día. Pero que en ese día descubras que la risa diaria es buena, que la risa habitual es sosa y la risa constante es malsana.
Te deseo que descubras, con urgencia máxima, por encima y a pesar de todo, que existen, y que te rodean, seres oprimidos, tratados con injusticia y personas infelices.
Te deseo que acaricies un gato, alimentes a un pájaro y oigas a un jilguero erguir triunfante su canto matinal, porque de esta manera, te sentirás bien por nada.
Deseo también que plantes una semilla, por más minúscula que sea, y la acompañes en su crecimiento, para que descubras de cuántas vidas está hecha un árbol.
Te deseo, además, que tengas dinero, porque es necesario ser práctico. Y que por lo menos una vez por año pongas algo de ese dinero enfrente a ti y digas: "Esto es mío", sólo para que quede claro quién es el dueño de quién.
Te deseo también que ninguno de tus afectos muera, pero que si muere alguno, puedas llorar sin lamentarte y sufrir sin sentirte culpable.
Te deseo por fin que, siendo hombre, tengas una buena mujer, y que siendo mujer, tengas un buen hombre, mañana y al día siguiente, y que cuando estén exhaustos y sonrientes, aún sobre amor para recomenzar.
Si todas estas cosas llegaran a pasar, no tengo más nada que desearte.
Besos! (
beluu . )
(*) escrito el 31.12.2010, publicado el 05.01.2011